El equipo de Pablo De Muner salió a la cancha siendo consiente de que de ganar quedaría como puntero de la Zona A de la Primera Nacional, pero la noche soñada se transformó en un balde de agua fría.

Apenas a los 4 minutos del partido Quilmes tenía su primera llegada (y la primera del partido) al arco de Ignacio Arce. A los pocos minutos nuevamente la pelota terminaba en manos del arquero local. El “Cervecero” salió con la fija idea de imponer sus condiciones de juego, y es que llegaron a Tucumán sabiendo que de quedarse con los tres puntos se aproximaban a la zona del reducido.

Quilmes supo plantear el partido y quedarse con los puntos en juego. Tras varias llegadas a los 23’ del primer tiempo Quilmes obtuvo un tiro de esquina del cual salió el primer tanto de la visita. San Martín tuvo algunas jugadas en los primero 45 minutos, pero ninguna llegó a ser un verdadero susto para Quilmes, así el local se fue al vestuario 1 a 0 abajo en el marcador y con un Tino Costa retrasado y con una defensa con desajustes.

Carlos Córdoba, arbitro del encuentro, dio el pitido inicial del segundo tiempo y Quilmes salió atacante, continuando firme con su planteo. San Martín por su parte ingresó con dos cambios, Agustín Sandona por Hernán Lópes y Daniel González por Lucas Cano en búsqueda de pegar el golpe del empate, pero a los 53’ llegaría el segundo tanto de la visita.

En el complemento la pelota estuvo para San Martín y tuvo más situaciones, pero el equipo no lograba terminar la jugada en gol en el arco de Rodrigo Saracho.

A los 70’ ingresaría Lucas González por Hernán Pellerano y a los 85’ Nicolás Moreno por Costa. Así cuando el reloj marcaba los 90’ el ingresante trajo el gol desde el banco de suplentes. Moreno anotó un golazo que sirvió de poco en el paso en falso del equipo pero que significó su primer gol en Primera.

En su análisis el DT “Santo” que tuvo la primera derrota desde que llegó al equipo analizó: “el partido fue por errores. Nosotros no pudimos aprovechar algunas situaciones para despegar. El PT fue parejo, ellos tuvieron un mano a mano apenas inició el partido y después nosotros tuvimos dos o tres para aprovechar y después un gol de pelota parada”.

Pero no todas fueron pálidas, De Muner supo enseñar su felicidad por la entrega del equipo, “esto es muy largo, todavía queda mucho por delante. Obviamente que duele perder, sobre todo de local, pero mañana hay que levantarse y pensar en Tigre”.

El DT de San Martín es un técnico de la “nueva era” que sabe el peso de lo psicológico en un jugador, posiblemente mucho tendrá que ver su pasado con la pelota. “Yo creo que hay que saber perder, es importantísimo. No podemos pretender ser imbatibles. Obviamente que nos duele porque teníamos una muy linda oportunidad, en tan poco tiempo, de quedar punteros cuando por ahí eso hace 11 semanas atrás era impensado. Hace 80 días que estamos en el club y está claro el crecimiento y la identidad que tiene el equipo, yo con eso estoy muy contento y eso es gracias a los jugadores”.

Una derrota no es caída y eso San Martín lo sabe y uno de sus referentes, Pellerano, lo compartió una foto del equipo a la cual jugadores, ex compañeros y parte del cuerpo técnico comentaron con alientos dejando ver la unión y el claro objetivo en común que tienen en Ciudadela.