Policiales Por: Redacción18/11/2021

Repudio generalizado al abuso denunciado por las periodistas Mariana Romero y Carolina Ponce de León

Conferencia de prensa tras el triunfo del Frente de Todos, Tucumán.-

Las periodistas tucumanas Carolina Ponce de León de Radio Universidad y Mariana Romero de Los Primeros tv.  denunciaron haber sido víctimas de abuso sexual en la Casa de Gobierno mientras trabajaban cubriendo las elecciones legislativas del pasado domingo. Los hechos fueron repudiados por el sindicato de trabajadores de prensa de la provincia, por funcionarias del gobierno y por el jefe de Gabinete y gobernador en uso de licencia Juan Manzur.

Ponce de León relató que tres personas la acorralaron: “Una me metió la mano por adelante, otra por atrás, yo me puse la cartera entre las piernas para frenar esto un poco”. Y agregó: “A una de estas personas se le enganchó un anillo en un gancho que tiene mi cartera. Me daba tanta vergüenza la situación, quería llegar hasta donde estaban mis compañeras, que se dieron cuenta de que algo me pasó por mi cara y me puse a gritar”.

Cuando la periodista denunció el hecho con los organizadores del evento, le dijeron que “no podían controlar a tanta gente”. Romero, quien presenció ese momento, contó que “ahí mismo estaba el mismísimo Ministro de Seguridad, pero no la dejaron llegar a él. Encima, una mujer desequilibrada se ofendió porque mi compañera empezó a gritar que así no se puede trabajar. Y la atacó”.

Semanas antes, Romero había sido atacada mientras cubría el discurso del entonces gobernador Manzur durante las PASO. “Esa noche, a la conferencia de prensa en Salón Blanco hicieron entrar a muchas personas que no eran trabajadores de prensa. Fanáticos que estaban ahí solo para aplaudir. Cuando el gobernador empezó a hablar, ellos se mezclaron con la prensa”, recordó en sus redes sociales.

Y continuó: “Yo sentí que alguien me manoseaba de una manera tan fuerte y descarada que pensé que era alguna de mis compañeras intentando acomodarme algo en el bolsillo trasero. Pero no se detenía. El amontonamiento era tal y yo con las dos manos ocupadas, que no podía darme vuelta”.

Cuando la periodista logró soltarle la mano al abusador, éste se acercó más a ella: “Pasé un rato sin problemas, hasta que el tipo me apoyó. Me aleje como pude. Al rato, me puso una mano en la nuca y así terminamos de escuchar el discurso del gobernador”.

A través de un mensaje por Twitter, Manzur condenó los hechos denunciados por la periodista, y se comprometió a “hacer todo lo que esté a mi alcance para ayudar a esclarecer estos actos de violencia y que los abusadores sean condenados por la justicia”. “El compromiso con la reparación de este tipo de abusos debe ser una causa de todos y todas”, concluyó.

En la misma línea, la vocera gubernamental Gabriela Cerruti, en conjunto con la secretaria de Medios Valeria Zapesochny, afirmó su respaldo a las periodistas agredidas, y apuntó: “La garantía de la libertad de expresión incluye en el caso de las mujeres y disidencias medidas adicionales por parte de gobiernos e instituciones para prevenir situaciones de abuso, acoso o violencia y asegurar el ejercicio de la profesión en condiciones de equidad”.

“Las situaciones de abuso que atravesaron las periodistas Mariana Romero y Carolina Ponce de León mientras trabajaban son inaceptables y constituyen una grave manifestación de violencia de género que debe ser repudiada y cuestionada por todas, todes y todos. Mi solidaridad con ellas”, sentenció la ministra de Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta.

El Gobernador de la Provincia, Osvaldo Jaldo, también expresó su repudio en la red social del pajarito. "Pongo a disposición todos los elementos y medidas que sean necesarias y solicito el pronto esclarecimiento para que los responsables sean rápidamente identificados y puestos a disposición de la Justicia", indicó. 

La Asociación de Prensa de Tucumán (ATP) aseguró en un comunicado que “estos apremios se vienen sucediendo y repitiendo de manera sistemática en particular con las trabajadoras mujeres, donde lo preocupante es que ocurran en eventos oficiales, lo cual expresa cuanto menos una indiferente actitud para con la temática de género y su respectiva violencia, cuando no una acentuada y desatendida postura de violencia institucional ante la falta de interés”.

Carolina realizó una denuncia ante la comisaría 1º y en la fiscalía. “Tuve que volver el lunes para describir a las personas. Solamente pude ver a las personas por su ropa. No puedo decir de qué lado o partido son, la verdad es que entraba cualquiera”, agregó en su testimonio.