En un mural, Ismael Lucena vence al gatillo fácil
El artista Gabriel Bazán comenzó a llenar de color al paredón de la plaza de barrio Experimental II. En su obra, el joven asesinado logra frenar a la muerte
Por Mariana Romero
Ismael Lucena extiende su mano izquierda y detiene a la muerte. El arma que lo apunta tiene cuerpo de ave de rapiña pero, esta vez, no lo mata.
Parece la descripción de un sueño pero la imagen está ahí, plasmada en el mural que, por estas horas, pinta el artista Gabriel Bazán antes del inicio de la jornada cultural para exigir justicia por Ismael Lucena.
Desde las 14, en la plaza del barrio Experimental II en Las Talitas, tocarán Karma Sudaca, Skaraway y otras bandas. Allí también se realizará una radio abierta para exigir que la justicia diga, finalmente, cuándo comenzará el juicio oral.
Hace tres años y medio, la historia fue muy distinta a la que se ve hoy en el mural. La noche del 9 de noviembre, Luciano golpeado hasta morir presuntamente por policías de civil que hoy están imputados por homicidio.
Llevaba la gorra puesta esa noche, porque nunca se la sacaba y hoy, en el mural, también la lleva en la cabeza. La gorra, símbolo del pibe de barrio, del "negrito villero" es el estigma que dio libre a la golpiza que terminó con su vida, queda plasmada para siempre en el murallón de Las Talitas.