Las nadadoras trans no podrán competir en pruebas femeninas

La Federación Internacional de Natación (FINA) presentó sus nuevas reglas de competencia. Los nuevos cambios impiden a las nadadoras transgénero competir en pruebas femeninas. La nueva medida considera a toda deportista que haya completado su transición después de la pubertad.

La pubertad o los 12 años será la edad de quiebre que determinará cómo competirá una atleta.

La respuesta de la FINA no fue solo de carácter prohibitivo, sino que, además, propone la creación de una nueva categoría de competencia abierta sin distinción de géneros para que todos los deportistas puedan ser incluidos en las competencias.

La votación que se llevó a cago en Budapest en paralelo al Campeonato Mundial de Natación se aprobó con un 71,5% después de considerar argumentos de atletas, médicos, científicos, responsables legares y representantes de derechos humanos.

Sobre la categoría a crear se sabe que en los próximos seis mesas se estudiará cómo se desarrollará la practica teniendo presente la competencia.

El caso que disparó la decisión

La decisión de la FINA en Hungría surgió como consecuencia de la irrupción de Lía Thomas en la natación universitaria de Estados Unidos.

Thomas tiene 22 años y este año se convirtió en la primera nadadora trans en ganar la final de 500 yardas nacionales en un torneo universitario batiendo récord. Hasta 2019 Lia había competido como Will en la categoría masculina

En marzo la Federación de Natación de Estadios Unidos anunció que limitaba a 5 nanomoles por litro de sangre de testosterona para las deportistas. El Comité Olímpico Internacional promulga que la hormono tiene que estar por debajo de 10 nanomoles por litro de sangre.

La testosterona es la hormona que influye en el aumento de masa muscular.