La joven fue vista por última vez a mediados de julio cuando salió de su trabajo en el Motel Ovni, ubicado en la ruta provincial 301, y se dirigió a tomar el colectivo con destino a San Pablo. "La recepcionista y el guardia de seguridad del motel vieron que salió y que luego tomó el colectivo camino a San Pablo. Después dos personas que viajaban en el colectivo la vieron y un chico que se bajaba en el mismo lugar que ella nos dijo que no la vio descender del colectivo”, relató Federico Paz, hermano de la víctima.

La principal hipótesis de los investigadores es que la atacaron cuando bajó del colectivo para robarle el celular. La joven habría habría intentado escapar pero la persiguieron y la mataron a golpes.

 Sin embargo, uno de los sospechosos, chofer de otro imputado conocido como "Pocho", dio su versión de los hechos ante la Justicia y relató un fin de semana lleno de excesos. Priscila llegó el domingo 22 de julio por la mañana a la casa donde se encontraban todos reunidos tomando bebidas alcohólicas desde el día anterior. El hombre sostuvo que vio "fea" la situación y se fue cerca del mediodía. A esa hora la joven seguía en el lugar, publicó Periódico Móvil.

Unas horas más tarde, dijo, su jefe lo llamó para que volviera y lo llevara a "comprar porquerías". El chofer lo hizo pero no vio entonces a Priscila. Recién volvió a tener contacto con ella el lunes, después de que recibiera un nuevo mensaje de "Pocho" para que lo pasara a buscar. El chofer manifestó que al llegar al lugar se encontró nuevamente con la joven de 27 años. "Estaba drogada, borracha y se la veía perdida", describió. Todos los presentes, su jefe, otros dos hombres, una mujer e incluso ella, se subieron a su camioneta. Ya era la medianoche y Pocho le indicó que manejara camino a San Pablo.

Estacionó al costado de la ruta 301, en un sembradío de cañas. Él fue el único que se quedó arriba el vehículo. Los demás bajaron y se alejaron unos 50 metros. Volvieron media hora después, todos menos la víctima. /tn.com.ar