Tragedia de los Gendarmes: el estado de la ruta venía siendo denunciado desde 2009. Audio

El estado de la ruta 34, en la que perdieron la vida 43 gendarmes la semana pasada, era objeto de denuncias desde el año 2009. De hecho, los vecinos de la zona aseguran que en el tramo donde desbarrancó el colectivo, los vehículos aceleran para recuperar el tiempo perdido en tramos anteriores por el mal estado del camino. Indican que, cuando lo hacen, muchas veces las cubiertas llegan dañadas y se producen accidentes.

El estado de la Ruta 34 ya había sido denunciado en el año 2009 por el entonces director de Transporte de Santiago del Estero, Enrique Romero. El ex funcionario indicó que el 12 de agosto de 2009 se había elevado un informe al organismo que controlaba a la empresa Vial 5, por entonces consecionaria de la ruta.

"Manifestamos el pésimo estado de la ruta, que hasta el momento no ha sido revertido. Había ondulaciones y abollamiento del asfalto, hasta en el peaje. También había descalces de hasta 15 centímetros. Eso generaba que, quien salía a la ruta y volvía, las ruedas se le ponían directamente en contramano. En aquel momento, al 85% le faltaba señalización horizontal y tenía falta de mantenimiento en su totalidad", señaló Romero a Periódico Móvil.

Romero indicó que, en el informe, responsabilizó al Estado por las consecuencias en pérdidas de vidas que ocasionara el mal estado del camino.Sin embargo, indicó que nunca recibió respuestas a sus planteos.

Por qué la llaman "de la muerte"

La 34 es una de las rutas más importantes del norte del país. Une las provincias de Jujuy, Salta, Tucumán y Santiago del Estero con el puerto de Rosario, por lo que la circulación de tránsito pesado es alta. Gran parte del trayecto está a cargo de la empresa VialNoa, del grupo Electroingeniería, aunque la firma señaló que el tramo en que se produjo el accidente escapa a su órbita.

Vialidad Nacional peritó el tramo en que se desbarrancó el colectivo que trasladaba a los gendarmes y concluyó que el camino estaba en buen estado. Los vecinos coincidieron, aunque alertaron que los vehículos llegan a ese lugar con las cubiertas dañadas por el mal estado de los tramos anteriores. Aceleran para tratar de recuperar el tiempo perdido y ocurren accidentes.

El propio intendente de Rosario de la Frontera, Gustavo Solís, reclamó el día del accidente que la ruta estaba "totalmente destruída, muy bacheada". "Los que conocemos la zona tratamos de no andar de noche", agregó.

Las víctimas

Mauricio Arraigada, abogado de los familiares de los gendarmes, dijo en declaraciones a El Tribuno de Salta que el micro "no cumplía con las condiciones mínimas por no tener las habilitaciones" para circular.

"Un colectivo que pertenece a la fuerza debe ser verificado por el área logística de Gendarmería. Distintos indicios e información precisa dan cuenta que el colectivo no cumplía con las condiciones mínimas por no tener las habilitaciones exigidas por ley", agregó.

Y remarcó que "cualquiera puede darse cuenta que el ómnibus con el tamaño que tenía no podía circular con ese estado de neumáticos."

Arriagada dijo que inició una demanda contra los oficiales que debieron chequear el estado del vehículo en la justicia federal de Santiago del Estero. "Las figuras serían las de estrago por dolo eventual y defraudación al Estado nacional", precisó el abogado.

Finalmente, indicó que "el chofer estaba bajo tratamiento psicológico, no podía manejar, se le ordenó que lo haga y él no quería hacerlo, por lo que dejó constancia en el libro de guardia que las cubiertas no estaban en condiciones".

La carta documento de Enrique Romero que por el año 2009 se desempeñaba como secretario de transporte de Santiago del Estero