El joven ejecutado en San Javier resulto ser un delincuente

Ayer viernes por la mañana fue hallado el cuerpo sin vida de un hombre joven en uno de los miradores de San Javier. Al lado del fallecido se hallaron vainas servidas. Más tarde se supo que el sujeto salió a robar y que había recibido dos disparos en el tórax.

Según fuentes policiales, cerca de las 9 de la mañana de ayer viernes, un chofer de la línea 118 llamó al 911 para alertar sobre un cuerpo tirado boca abajo en el segundo mirador del cerro San Javier, la zona más comúnmente conocida como curva del Gauchito Gil. Sin embargo en otros medios trascendió que quienes encontraron el cadáver fueron empleados de la Dirección Provincial de Vialidad que realizaba tareas de mantenimiento a la vera de la ruta 338. Mientras estaban en pleno trabajo, los operarios se toparon con el macabro hallazgo cerca de las 8 de la mañana, y dieron aviso a la policía.

Lo cierto es que al llegar al lugar la policía constató que la persona se encontraba sin vida, y que aparentemente se trataría de un hombre joven. Al lado del cuerpo los uniformados encontraron dos vainas servidas, que según los oficiales, podrían ser de un arma calibre 11,25 mm.  

Ahora los investigadores tratan de identificar al autor del asesinato. En un principio se creía que al joven encontrado lo habían intentado asaltar y como consecuencia habría recibido dos disparos mortales en el pecho. Según publicó La Gaceta los peritos informaron que la hora del fallecimiento fue entre las 22 y las 23 del jueves pasado, hora en la que normalmente se instalan parejas en esa zona. Por este motivo los pesquisas plantearon la posibilidad de que el joven podría haber perdido la vida en un intento de robo.

Curiosamente mientras la policía aún investigaba lo que sucedió, una mujer se presentó en la base de Homicidios para denunciar la desaparición de su pareja a quien identificó como Diego Alfredo Sebastían Díaz, de 31 años.

La mujer relató que Díaz había salido a robar junto a otros dos amigos por la zona de San Javier en un auto Peugeot verde. Además dijo que cerca de la medianoche se presentó en su casa uno de los amigos con los que salió su cónyuge, para avisarle que habían sido atacados a balazos por personas que se movilizaban en un vehículo. Declaró además que los compañeros de su pareja le confiaron que uno de ellos, fue herido en el pecho y que no sabía nada de Díaz porque al escuchar los tiros, se ocultó en el monte.

Los policías de Homicidios condujeron a la mujer hasta la morgue, donde identificó el cuerpo de su esposo. Ahora la investigación radica en descubrir a la persona que realizó los disparos y la situación en la que sucedieron los hechos.