El ministro de Salud de la provincia, doctor Luis Medina Ruiz, encabezó una nueva sala de situación en donde se analizó el escenario epidemiológico de Tucumán.
En la oportunidad, el ministro informó que se está observando una leve disminución de casos y una meseta un poco más baja, con alrededor de mil casos diarios de cuadros febriles por guardia, de los cuales el 30 por ciento son segundas o terceras consultas por el mismo cuadro: “Ya estamos viendo las salas de espera más descomprimidas y con más fluidez de pacientes. Notificamos para la semana anterior unos 3.700 casos, a los que se les suman otros 6.000 de semanas anteriores. Esta disminución no es significativa así que no debemos confiarnos. Tenemos que hacer una consulta rápida en caso de notar síntomas compatibles con dengue. Aquel que no tiene la capacidad de hidratarse, debe realizar una consulta para recibir el tratamiento oportuno con hidratación parenteral. La otra complicación grave de este cuadro es la hemorragia, y ante eso también hay que consultar”.
Por su parte, la directora de Epidemiología, doctora Romina Cuezzo, contó que la notificación total de la provincia es de 39.382 casos, pero que se superó el peor momento y que hace un par de semanas se viene notando un descenso. “Sin embargo, aún tenemos una alta proporción de casos activos, por lo tanto, todavía estamos en alerta por una alta circulación viral. Son ciertos departamentos, como capital, Cruz Alta y Yerba Buena, los que vienen teniendo mayor afectación. Es importante sostener las medidas de prevención”, agregó.
La Dirección de Epidemiología informa el fallecimiento de dos pacientes de sexo femenino. La proporción de personas con cuadros graves no es muy elevada para esta patología, pero existe la posibilidad de que algunos, en función de la respuesta inmune, puedan tener cuadros severos e incluso fallecer. En ese sentido se refuerza la importancia del control de los signos de alerta.