Con la llegada del frío vuelven las intoxicaciones por monóxido de carbono, un problema que afecta a unas 40.000 personas cada año en Argentina y causa alrededor de 200 muertes.
Al respecto, Patricia Villagra, médica coordinadora de Guardias de Emergencias Pediátricas y Neonatales de la provincia, explicó que en épocas invernales son muy frecuentes las intoxicaciones por monóxido de carbono es por esto que se deben tomar medidas adecuadas para evitarlas.
“Es frecuente el uso de carbón, estufas, hornallas encendidas y la combustión de estos dispositivos es tóxica para el organismo. Esto sucede cuando se acumula este gas en la sangre ya que hay demasiado monóxido de carbono en el aire y el cuerpo reemplaza el oxígeno en los glóbulos rojos por monóxido de carbono, esto puede generar un daño grave en los tejidos o incluso la muerte”, destacó Villagra.
En consecuencia, explicó la doctora, la persona puede sentir dolor de cabeza, irritabilidad, sensación de falta de aire, mareos y estos signos hay que tenerlos en cuenta para realizar una consulta médica oportuna.
“Lo recomendable es que se encienda el carbón o la leña, afuera de las casas y se ingrese con el mismo ya prendido. Los ambientes deben tener ventilación con el fin que el aire se renueve, además de revisar las estufas y los artefactos a gas”, cerró.