Un ladrón se escondió en una chimenea y murió quemado

Llegó a la casa en algún momento de la noche y eligió el peor escondite posible. El dueño de la vivienda no sabía que estaba ahí y el desenlace fue trágico

Policiales 30/11/2015 Mariela Alderete Mariela Alderete
Un ladrón murió ayer en la localidad estadounidense de Huron, en California, cuando el dueño de la casa que intentó asaltar encendió su chimenea, donde el asaltante se había ocultado. 

Como indicó Brandon Pursell, sherif del condado de Fresno, el dueño de la casa dio aviso a la Policía cuando escuchó gritos y su domicilio comenzó a llenarse de humo. Ya era demasiado tarde.

Cuando los bomberos llegaron no pudieron hacer nada por salvar la vida del presunto ladrón, a pesar de que intentaron echar abajo la estructura con martillos neumáticos para rescatarlo. 

Según los primeros detalles que se conocen sobre la investigación, el asaltante llegó a la casa en algún momento de la noche para cometer el robo, pero quedó atascado en la chimenea. 

El propietario encendió el fuego en la mañana siguiente, sin saber que un hombre se encontraba en su interior.

Por ahora, la Policía continúa con las pesquisas para aclarar lo sucedido. El testimonio de los responsables de la investigación añade dramatismo al caso, dado que Pursell afirmó que durante el intento de rescate, el presunto ladrón respiraba y se movía... Es decir, aún estaba vivo. 

Ahora esperan los resultados de la autopsia para determinar su identidad y la causa de la muerte.
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