Osvaldo Jaldo, gobernador de Tucumán.
El gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, elogió los recientes anuncios del Gobierno nacional sobre la reducción de retenciones para productos agroindustriales y la eliminación total en el caso de las economías regionales. Sin embargo, enfatizó la necesidad de considerar las particularidades de las provincias del norte, como Tucumán y Salta, que enfrentan altos costos logísticos debido a su lejanía de los puertos.
“Es una decisión acertada. Apoyamos la medida del Presidente y del ministro de Economía, ya que favorece a las actividades exportadoras que generan divisas. Pero es fundamental tener en cuenta la situación de los productores del norte, quienes afrontan mayores costos de transporte”, señaló el mandatario.
Del mismo modo, Jaldo pidió un esfuerzo adicional por parte del Gobierno nacional para equilibrar las condiciones entre las distintas regiones productivas del país.
Recordemos que el ministro de Economía, Luis Caputo, había anunciado una reducción de retenciones para productos clave como soja, maíz, trigo y girasol, con vigencia hasta el 30 de junio. En tanto, para las economías regionales, como el azúcar y el limón, se eliminarán de manera definitiva.
El gobernador también destacó las políticas impositivas locales que buscan aliviar la carga sobre las actividades económicas de Tucumán. Entre ellas, mencionó las exenciones de Ingresos Brutos y Salud Pública aplicadas a sectores agrícolas y no agrícolas, como la producción de limón, azúcar, arándanos y frutillas, así como a servicios como los call centers.
Estas acciones implican un costo fiscal proyectado de $35.500 millones para 2025, pero, según Jaldo, son necesarias para fomentar la actividad económica, preservar empleos y dinamizar el mercado laboral en medio de una compleja coyuntura económica.
Asimismo, el primer mandatario subrayó que las provincias enfrentan desafíos adicionales al sostener servicios esenciales como salud, educación y seguridad. Por ello, instó al Gobierno nacional a garantizar recursos suficientes para atender estas responsabilidades.
“Valoramos esta política de alivio para los sectores productivos, pero es crucial que se reconozca el esfuerzo de las provincias y se promueva un reparto más equitativo”, afirmó. Pese a las dificultades financieras derivadas de la reducción en los fondos de coparticipación, el gobernador reiteró su compromiso de dialogar con los sectores productivos para buscar soluciones conjuntas.
“Estamos dispuestos a debatir alternativas que permitan a los productores desplegar su potencial y generar empleo genuino”, concluyó.
Los cambios anunciados representan un alivio significativo para economías regionales como el azúcar y el limón, pilares de la economía tucumana. Sin embargo, el desafío de reducir las desigualdades logísticas y mantener la sostenibilidad fiscal coloca a la provincia como un actor clave en el debate sobre políticas económicas nacionales y su impacto en las regiones más alejadas del centro del país.
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