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El Tribunal Oral Federal N°2 resolvió conceder el beneficio de prisión domiciliaria a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien afronta una pena de seis años de prisión por irregularidades en la adjudicación de obras viales durante su gestión.
La medida permite que la ex mandataria permanezca en su domicilio ubicado en la calle San José 1.111, en el barrio porteño de Monserrat, bajo estrictas condiciones de monitoreo. Entre ellas, se dispuso el uso obligatorio de una tobillera electrónica para garantizar su localización permanente.
Fuentes del Poder Judicial indicaron que la decisión se basa, entre otros fundamentos, en la edad de Fernández de Kirchner, que supera los 70 años, y en la necesidad de resguardar sus derechos fundamentales en un contexto de condena firme. “La ley contempla expresamente la posibilidad de sustituir la prisión en establecimientos penitenciarios por otras modalidades cuando las condiciones personales lo justifiquen”, sostuvo el tribunal en su resolución.
Gracias a esta disposición, la ex presidenta no deberá comparecer personalmente este miércoles en los tribunales de Comodoro Py para iniciar su detención formal. La ejecución de la pena se considerará en curso desde el momento en que quede bajo control domiciliario.
La causa conocida como “Vialidad” concluyó con la condena a seis años de prisión y la inhabilitación perpetua para ocupar cargos públicos, además de las costas del proceso. A partir de ahora, Cristina Kirchner deberá cumplir esta sentencia bajo arresto en su residencia, en el marco de una vigilancia electrónica dispuesta por el Ministerio de Seguridad de la Nación.
El caso continúa generando repercusiones políticas y jurídicas, mientras se reaviva el debate sobre los alcances de la prisión domiciliaria en figuras de alto perfil.
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