Le arrancaron el dedo en pleno centro para robarle un anillo
El hecho ocurrió en un edificio de San Juan 685 en pleno barrio Norte a cuatro cuadras de Plaza Independencia. La víctima, una mujer de 67 años, llamó al 911 para pedir la presencia policial y el urgente envío de una ambulancia
Policiales14/01/2016
Mariela Alderete
Foto: La Gaceta/Antonio Ferroni
Alicia Villagrán de Miranda, de 67 años, abrió la puerta del departamento que quería alquilar para mostrárselo a un hombre que se presentó como interesado. Nunca se imaginó la pesadilla que le tocaría vivir. El sospechoso, de aproximadamente 30 años, la empujó hacia el interior, cerró la puerta, la atacó salvajemente a golpes para quitarle la cartera y, no conforme con ello, le cortó el dedo anular de la mano izquierda para robarle un anillo de oro. Antes de escapar sin dejar rastros, el delincuente arrojó el dedo amputado en el piso del dormitorio. Esto ocurrió en un departamento ubicado en el edificio de San Juan 685, a cuatro cuadras de la plaza Independencia.
El hecho ocurrió ayer, cerca de las 13.30, cuando la víctima, que vive en un edificio de Muñecas al 600, llegó sola al lugar para mostrar el departamento que tenía para alquilar en el séptimo piso.
“Como a las 14.30 la señora golpeó la puerta de nuestro departamento pidiendo auxilio. Nos dijo que la había asaltado un muchacho de unos 30 años, alto. Estaba con el rostro totalmente desfigurado, con sangre en la cabeza y la mano ensangrentada. Fue horrible”, describió en diálogo con LA GACETA Noemí Correa (37 años), vecina del séptimo piso del edificio de San Juan 685. Ella llamó al 911 para pedir la presencia policial y el urgente envío de una ambulancia.
“La Policía tardó como 30 minutos en llegar y la ambulancia demoró un poco más. Estuvieron varios minutos tratando de encontrar el dedo, hasta que se llevaron a la señora, que estaba casi desmayada, con el rostro desfigurado y un tajo en la cabeza causado por los golpes que recibió”, acotó, a su turno, Patricia, otra vecina.
La mujer fue llevada de urgencia al hospital Padilla, donde recibió atención por traumatismos múltiples, un traumatismo encéfalo craneano y la amputación del dedo anular izquierdo. El esposo de la víctima llevó el dedo amputado en una bolsa con hielo para que puedan salvárselo. Debido a que en el Padilla no se realizan cirugías de reimplante óseo, Villagrán de Miranda fue derivada al Sanatorio del Norte, donde ayer a la tarde fue operada y quedó internada.
El portero del edificio, Ramón Ibarra, dijo que su horario laboral es de 8 a 13 y de 17 a 20, por lo que no se encontraba en la recepción en el momento del ataque. “A la hora en que ocurrió el robo hay muy poco movimiento en el edificio, sobre todo ahora, por las vacaciones”, explicó Ibarra, y aclaró que el inmueble no cuenta con cámaras de seguridad. Al cierre de esta edición, la Policía no tenía pistas concretas para dar con el sospechoso.
Las vecinas que auxiliaron a la víctima indicaron que ya hubo algunos robos en el edificio. “El año pasado un hombre se hizo pasar por albañil, dijo que venía a ver la humedad en las paredes, y en un descuido entró al dormitorio y me robó $ 6.000 que acababa de cobrar”, relató Correa.
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