Una adolescente Japonesa escapa de su secuestrador después de estar dos años cautiva.

Ana Saito, se dirigía al colegio como todos los días cuando fue interceptada por un joven, quien dijo ser el abogado de sus padres y que estos  estaban divorciándose, de esta manera logró que Ana, en ese entonces de 13 años,  se subiera a su automóvil.

Los afligidos padres realizaron la denuncia de la desaparición,  pero al poco tiempo recibieron algunas notas, supuestamente de Ana, en las que decía que necesitaba un descanso, que por un tiempo no regresaría a casa y que por favor no la busquen.

La joven permaneció cautiva en el departamento de su secuestrador, Kabu Terauchi  un universitario de 23 años, que  la encerraba bajo llave para que él pudiera seguir con sus actividades cotidianas como por ejemplo ir a la universidad.

Afortunadamente, un descuido de su captor hizo que recuperara la libertad. Ella salió del lugar donde estaba encerrada al aprovechar que el delincuente olvidó cerrar la puerta con llave. De inmediato llamó a su madre desde un teléfono público y fue rescatada en la ciudad de Tokio.

Un día después el secuestrador, fue apresado  por la policía que lo encontró  cubierto de sangre puesto que habría  intentado  suicidarse al cortarse la garganta.

Aunque no se sabe bien lo que pasó en todo ese tiempo en que la joven estuvo encerrada, se conoce que su captor seguía estudiando, de hecho, acaba de graduarse de la Universidad de Chiba.

Además era un aficionado a la informática. Las autoridades están a la espera de que el criminal se recupere de sus lesiones para declarar.