Consejos para tener en cuenta a la hora de calefaccionar la casa.

Las bajas temperaturas y las subas en las facturas del gas, trajeron la preocupación de como calefaccionar nuestro hogar de forma eficiente y económica a la vez. Lo bueno es que hay mucho que podemos hacer para mantener una buena temperatura en la casa y cuidar el bolsillo, para esto hay que seguir estos simples consejos

Acondicionar la vivienda para aislarla lo máximo posible del exterior, de esta manera impediremos que el frio entre y que el calor se escape. Si bien es cierto que hay aislantes que solo se pueden instalar durante la construcción, aun podemos hacer mucho por nuestra casa  si no hemos tomado estos recaudos antes o si la vivienda es antigua. Para esto hay que instalar un buen sistema de aislamiento en las ventanas. Hasta el 30% de las necesidades de calefacción, vienen por pérdidas de calor originadas en las ventanas. Lo más económico es poner burletes en todas las aperturas. También, aunque es un poco más costoso, se puede mejorar la calidad del vidrio y el tipo de carpintería de los marcos (lo más eficiente es de madera). El doble cristal reduce hasta un 50 % la pérdida de calor y el ingreso de frio o calor desde el exterior. También por las pequeñas hendijas que hay debajo de las puertas, sobre todo las que dan al exterior, se pierde mucho calor por lo que es recomendable colocar unas escobillas que sirvan de barrera, son económicas y de fácil instalación.

Durante el día es importante tratar de aprovechar la mayor cantidad de calor natural que da el sol, abriendo cortinas y persianas para dejar entrar la luz solar, pero ni bien se esconda el sol, hay que bajar las persianas y cerrar las cortinas para retener ese calor. Hay que aclarar que el uso de cortinas gruesas es una manera muy efectiva de proteger tu casa de la pérdida de calor a través de las ventanas.

También es muy importante no dejar de ventilar la casa, pero para no perder demasiado calor es conveniente hacerlo no demasiado temprano cuando hace mucho frio, sino más bien al medio día cuando la temperatura exterior es un poco más alta. Con 10 minutos es suficiente para renovar el aire, más tiempo sólo contribuirá a bajar la temperatura interior.

En el interior de la casa es recomendable cerrar las puertas de habitaciones que no utilizamos  para que el aire caliente no se desperdicie.

Hacer una revisión del estado de tu sistema de calefacción una vez al año, tener las instalaciones en buenas condiciones ayudará a tener un buen funcionamiento que se traducirá a fin de mes en un importante ahorro.

La llama de los artefactos a gas, debe ser estable, silenciosa y de color azul intenso. Cualquier variación en estos parámetros puede indicar un mal funcionamiento lo cual implica riesgos para los habitantes de la casa. No usar el horno para calefacción. Es menos eficiente que una estufa, por lo que aumenta innecesariamente su consumo de gas.

No tapar los calefactores con objetos ni colocar nada arriba de ellos. No usarlos para secar la ropa ya que esto obstruye la circulación del aire caliente otros ambientes. Otra de las cosas para tener en cuenta, es la de no poner muebles grandes en frente, como un sillón por ejemplo, ya que va a absorber el calor que éste irradia.

Los hogares y las salamandras a leña modernas, son una buena opción si estás pensando en comprar un sistema de calefacción. Tienen una entrada que permite ingresar la cantidad adecuada de aire en la cámara de combustión, logrando una eliminación completa y eficiente de los gases tóxicos de la combustión de la madera. Y ahorrarías mucho dinero en la factura del gas.

Pero donde realmente podríamos ahorrar mucho dinero es cambiando algunos hábitos. Los expertos aconsejan mantener una temperatura de 16-18 grados durante la noche, y entre 20-21 grados durante el día. Ten en cuenta que por cada grado adicional el gasto en calefacción aumenta un 7%.

Más allá de los dichos del presidente Macri, es verdad que si pretendemos andar en mangas cortas en pleno invierno gastaremos más dinero en calefaccionar la casa para darnos este gusto. Tampoco es necesario andar como en el “Polo Norte” en nuestro hogar, si regular a una temperatura cómoda donde con un abrigo liviano nos sintamos confortables.

Si se pasa mucho tiempo fuera de la casa, no dejar encendida la calefacción, es mejor programarla para 1 hora antes de llegar si es posible, o encenderla al llegar. Aquel mito que asegura que mantener la calefacción a una temperatura constante todo el día es más barato que apagarla es falso. Al apagarla se ahorra y el pico de gasto al encenderla de nuevo es inapreciable en la factura.

Si sigues estos simples consejos, te garantizamos que podrás ahorrar bastante dinero.