Salió de la cárcel acusado por violencia de género y 14 horas después mató a un joven por celos

En Aguilares, los vecinos aún no salen de la conmoción por la muerte de un joven de 26 años, asesinado a puñaladas el sábado a la noche por otro joven, conocido como  el “Loco Ale”, quien había salido 14 horas antes de la cárcel acusado por violencia de género contra la muchacha que estaba junto a la víctima.

El hecho ocurrió cerca de las 20.30, cuando la víctima, Gabriel Antonio Jerez, estaba en el pasaje Abregú al 800, en el barrio Libertad, hablando con una muchacha de 24 años, explicó una fuente policial al portal ecotucuman.com.ar

Según el relato de ella, la llegada del agresor los tomó por sorpresa. “Mancuso” -al que también conocen en Aguilares como “Loco Ale”- habría llegado a los gritos hasta donde estaban ellos y pronto comenzó a discutir con Jerez.

De pronto, los gritos se convirtieron en golpes. Al ver esta situación, alguien llamó a la Policía. Pero la pelea fue rápida y cuando llegaron los efectivos, Jerez estaba herido de muerte. Todo indica que los dos jóvenes pelearon hasta que “Mancuso” sacó un cuchillo y apuñaló dos veces en la zona de las costillas a su rival. El muchacho fallecido quedó tirado en una despensa de la cuadra, publicó el  portal de noticias.

Al ver lo que había hecho, el agresor -oriundo del barrio 12 de Octubre- quiso salir corriendo, pero los gritos habían alertado a los vecinos. Un grupo de hombres, al ver la escena, lo desarmó y lo entregó a la Policía, relata el sitio.

El herido fue llevado hasta el hospital local pero llegó sin vida. Según el informe médico, además de las puñaladas, tenía una herida en el labio, otra en el rostro, y lesiones en el cuero cabelludo.

Desde la Justicia se ordenó que el agresor quedara tras las rejas y que Criminalística de la Regional Sur revisara la escena del crimen. Allí se secuestraron las motos de ambos jóvenes, un cuchillo de cocina con el mango de plástico y la hoja doblada, una manopla con punta, ropa de la víctima y dos elementos que tenían sangre: un cartón y un trapo.

Luego de aprehender al asesino, los efectivos advirtieron que “Mancuso” había estado allí, tras las rejas en un calabozo, 14 horas antes del asesinato. Había estado privado de su libertad por violencia de género contra la muchacha que charlaba con Jerez cuando él llegó. Había sido liberado a las 6.45 esa misma mañana. No se descarta que, preso de los celos, haya atacado a Jerez al verlo con la joven.