La madre que asesinó a sus propios hijos es obstetra

La joven madre que mató a sus pequeños de 3 y 4 años mientras dormían, en un primer momento fue trasladada al Hospital Centro de salud debido a los cortes que ella misma se hizo en el cuello y las muñecas luego de atacar a sus hijos. Más tarde fue dada de alta y trasladada al Hospital Padilla donde es atendida por un psiquiatra.

Fuentes judiciales relataron a Periódico Móvil que Nadia Gisella Fucilieri es obstetra y tiene cargo en un hospital de esta capital

Los pequeños fueron degollados por la joven que habría utilizado un bisturí, con el que atacó a los niños mientras dormían. Sin embargo, trascendió que la pequeña niña tendría heridas en sus extremidades que revelarían que se defendió del ataque.

Entre las 8 y las 9 de la mañana una hermana de Nadia Fucilieri se dirigió a la calle Santa Fe al 1844 donde residía la joven madre con sus dos pequeños hijos, para llevar al mayor de sus sobrinos al jardín de infantes.

Según fuentes judiciales cuando ingresó a la vivienda se encontró con un cuadro aterrador, los niños yacían muertos en la cama y su hermana herida con cortes en las muñecas y el cuello. Las mismas fuentes informaron que en el lugar también estaba la abuela de los pequeños. Ante la terrible escena las mujeres llamaron al 911 y a una ambulancia para Fucilieri.

Por otro lado desde la policía trascendió que además en la vivienda se encontró una carta con tono de despedida dirigida a los familiares.

Silvia Furque abogada del padre de las criaturas confirmó a este medio, que la madre tenía problemas psicológicos y que su cliente ya habría advertido de esta situación. Además relató que el padre no veía a los pequeños hace 9 meses porque Nadia Fusilieri lo había denunciado por violencia de género y le habían impuesto una restricción de acercamiento. En este último tiempo la pareja se hallaba en juicio por la cuota alimentaria.

Otro dato relevante es, según fuentes judiciales, que sabía dónde y cómo realizar los cortes a los niños ya que fueron de tal precisión que se desangraron en pocos minutos.