

“Estamos muy preocupados porque sigue sin resolverse el futuro del transporte público, queremos que esto se defina cuanto antes por el bien de empresarios y usuarios”, lamentó Daniel Orell, gerente de la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat), a la salida de la reunión en la Presidencia del Concejo Deliberante.
Los empresarios presentaron ayer un nuevo pedido de ajuste, justificando la suba en el valor solicitado por cinco puntos: “A partir del primer día de enero se produjo una serie de incrementos, con un 25% de aumento en los combustibles por la quita de subsidios nacionales; el aumento en la tasa de Ingresos Brutos, que pasó del 2,5% al 3%; el revalúo de los valores básicos para el calculo del Impuesto Automotor; la suba del 6% en los sueldos del personal definidos en la última paritaria y la afectación de los insumos dolarizados”. (Información tomada de La Gaceta)
Los empresarios habían solicitado en diciembre llevar la tarifa de los $ 9,35 actuales a $ 15,98 (un aumento del 70%).
Un mes y medio después de la primera presentación, desde Aetat pidieron un boleto a $ 17,04, es decir, una suba del 82%. En el ínterin se rompió un acuerdo político entre los concejales y la Intendencia para aumentar la tarifa en una sesión extraordinaria, y la Municipalidad consideró en un informe de la Subsecretaría de Transporte que la nueva tarifa no debía ser superior a $ 11,70.
En simultáneo, diferentes entidades de taxis solicitaron subir la bajada de bandera de los $ 13 actuales a $ 20, y que la “ficha” cada 100 metros pase de $ 1,30 a $ 2 (una suba del 53%). Hasta marzo, cuando se reanude el periodo de sesiones ordinarias, el Concejo sólo puede tratar las subas tarifarias por pedido del intendente, Germán Alfaro.





