El martes pasado en las redes sociales se hizo viral un video de un joven que bailaba arriba de un semáforo en La Plata mientras festejaba el triunfo de Argentina sobre Croacia y la clasificación a la final del Mundial. Lo que se observa además en esas imágenes es que el hombre cae al vacío. Ahora esa persona reapareció, contó que terminó en el hospital por haberse fracturado y pide ayuda para que le presten una silla de ruedas.
En el video se puede ver al hombre, llamado Leo Antúnez, que baila sobre dos postes del semáforo mientras está aferrado a cables. Luego se suelta y, cuando queda colgado para bajar, cae al piso desde unos cinco metros.
En distintas imágenes filmadas por personas que celebraban la victoria argentina en esa misma esquina registraron no solo la caida, sino también los pasos de baile sobre el semáforo mientras se agarraba de los cables de luz previo al golpe.
Ahora, Leo, oriundo de Berisso, contó a través de su perfil de Facebook que la caída le provocó una fractura en una de sus piernas y que necesita una silla de rueda hasta que lo operen.
“Hola buenas tardes para toda la gente. Yo soy el que cayó del semáforo de 7 y 50″, comenzó.
Luego, agregó: “Ando necesitando que alguien me preste una silla de ruedas hasta que me operen. Yo la voy a cuidar bien".
En un segundo posteo, redobló la apuesta: “Aparte, la necesito para poder ir el domingo a 7 y 50″, la esquina del golpe que pudo haber sido mortal. El joven dejó sus datos personales en Facebook para quienes lo puedan ayudar.
Entre las respuestas a su posteo están quienes lo critican por haber decidido treparse hasta allí, también quienes lo cargan luego del golpe y otra persona que le comentó que sí tenía una silla de ruedas para ofrecerle hasta el momento en que tenga que ser operado.
Lo cierto es que en los festejos que se vienen dando por el buen desempeño de la Selección en la Copa del Mundo, la esquina de 7 y 50 es una de las más tradicionales de la ciudad de las diagonales para las celebraciones deportivas. Y en muchas ocasiones se pudo ver cómo muchos arriesgan sus vidas trepándose a edificios o a distintos carteles públicos. / Clarín