


Un aviso en una red social llevó a dos jubilados santiagueños a caer en una millonaria estafa virtual
11/12/2024

Una pareja de jubilados santiagueños fue estafada en más de $ 3.000.000, vía online. El ejecutor fue una "voz anónima" que tras ofrecerles una falsa promoción de una prestadora de TV por cable, convirtió el celular de la víctima en una ventana a sus cuentas bancarias, y no escapó a la tentación de requerir un préstamo.
Las víctimas de esta nueva corriente delictiva, netamente tecnológica, resultaron Esther Cristina Larcher, abogada y jubilada, y su esposo, Jorge López, ambos domiciliados en el barrio Centenario de la capital santiagueña.
Ambos relataron que su odisea sobrevino el 5 de diciembre, cerca de las 16. Jorge vio en Facebook una promoción por una rebaja. Llamó al celular de la publicidad y del otro lado, lo atendió una voz de tonada cordobesa.
Según su relato, y la denuncia interpuesta ante Delitos Económicos, el sujeto supeditó el trámite a una serie de requisitos. En minutos, los damnificados le habrían facilitado un acceso a su celular desde una aplicación denominada quicksupport.
Mal pensaron los jubilados que obtendrían una promoción. En horas, descubrieron que los habían embaucado, pero al día siguiente recibieron la real magnitud de la estafa.
El cordobés había vaciado dos cuentas en el Banco Nación: una por $ 280.000 y otra de $ 30.000. No conforme, solicitó un préstamo (y le fue otorgado) por $ 2.700.000, pagadero en 72 cuotas.
Durante las casi tres o cuatro horas en que Larcher y Jorge no pudieron tener acceso online al banco, el individuo hizo una extracción suculenta: $ 2.000.000. No pudo retirar los $ 700.000, debido al alerta de las dos víctimas.
Agobiados, cansados, ahora desandan su historia y el martes lamentaron tamaño agujero negro. "No tenemos nada de nada de dinero. No sabemos cómo haremos y ya hemos ofrecido las pruebas al banco, a fin de que tenga en claro que no hemos pedido el préstamo", subrayaron.
Al mismo tiempo, los expertos de Delitos Económicos, guiados por la fiscal, Belkis Alderete, trabajan tras la ruta de los $ 2.300.000.
La tecnología reconoce que el dinero no puede perderse en la nada. Aún audaz la "jugada", el recorrido del dinero hasta su posterior cobro, va dejando huellas. Y los policías partieron resueltos en determinar quién se presentará al cobro. /El Liberal







