Al rededor de 70.000 tucumanos están en riesgo de perder los subsidios en las facturas de luz debido a un cambio en las categorías del Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE), implementado por la Secretaría de Energía de la Nación.
Ante esta situación, José Ricardo Ascárate, interventor del Ente Regulador de los Servicios Públicos de Tucumán (ERSEPT), brindó detalles sobre las acciones que se están llevando a cabo y los pasos que deben seguir los usuarios afectados.
Según explicó Ascárate, la medida afecta principalmente a los usuarios que pasarán de la categoría N2 (ingresos bajos) a N1 (sin subsidios). “No es un problema exclusivo de Tucumán; se observa un fenómeno similar en provincias como Chaco, Formosa y Salta, donde también se registraron importantes recortes en los subsidios”, detalló.
El interventor señaló que el ERSEPT ha detectado inconsistencias en las bases de datos nacionales desde octubre, lo que podría dejar a unos 20.000 usuarios tucumanos sin el beneficio debido a errores en la clasificación.
Ascárate precisó que los errores incluyen exclusiones indebidas y asignaciones incorrectas de subsidios en administraciones previas. “Durante el gobierno anterior, se otorgaron beneficios a sectores de altos ingresos. Ahora, con este reordenamiento, usuarios de bajos recursos están siendo injustamente excluidos”, afirmó.
Actualmente, se estima que cerca de 60.000 tucumanos enfrentan el riesgo de perder el subsidio. Para mitigar los efectos, el ERSEPT decidió no implementar los cambios hasta que cada caso sea evaluado individualmente.
Para los afectados, Ascárate recomendó iniciar un reclamo formal en caso de exclusión injustificada. Los pasos a seguir son:
- Reclamo ante la Nación: Los usuarios deben presentar su queja a través del sitio oficial del RASE o acudir a las oficinas del Ministerio de Energía.
- Gestión provincial: Si el reclamo no es atendido, pueden recurrir al ERSEPT, que actuará como intermediario con la Secretaría de Energía para revisar el caso.
Además, recordó que la categorización depende de los ingresos declarados por cada hogar. “Para ser considerado N2, los ingresos deben estar por debajo del valor de una canasta básica total, que ronda los $900.000”, explicó.
Mientras miles de tucumanos aguardan respuestas, el ERSEPT continúa trabajando para garantizar que los subsidios lleguen a quienes realmente los necesitan, en un contexto de creciente preocupación por el impacto económico de esta decisión.