Un hijo de Lázaro Báez dio detalles en la Justicia de la relación de su padre con Néstor y Cristina Kirchner

Leandro Báez ingresó pocos minutos antes de las 11 para declarar en la causa Los Sauces SA -inmobiliaria de la familia Kirchner-. El menor de los hijos varones del empresario K, Lázaro Báez, a diferencia de las anteriores indagatorias que enfrentó, decidió responder preguntas.

Se refirió al igual que su hermano Martín a que todo era “decidido por Lázaro y no daba lugar a nada”, pero además señaló que la relación "la tenía con Néstor que era su amigo, después Cristina sé que tuvo trato pero no sé si era el mismo, Lázaro era muy reservado en la relación con ellos", y admitió los vínculos comerciales y que después de 2013 "hubo una ruptura y Lázaro habló con su contador para dar de baja a los contratos (con Los Sauces)" y que conoció a los Kirchner "en un asado en la estancia de Austral" a excepción de Florencia "a quien conozco sólo de vista".

Integrantes de varias empresas desde jóvenes, con firma autorizada en la firma insignia de su padre, Martín y Leandro Báez están investigados en la causa Los Sauces SA donde el juez Claudio Bonadio investiga “un enjambre societario” entre la inmobiliaria de Cristina Kirchner y cuatro sociedades del Grupo Austral que pagaron en diferentes conceptos, más de 10 millones de pesos.

En ese escenario donde se detectaron cheques firmados por los hijos del empresario K y diversas relaciones comerciales con la sociedad de la ex Presidenta, declararon Martín y Leandro Báez con un mismo lineamiento: quien tomaba todas las decisiones empresariales era su padre "manejaba todo, todo y por él pasaba todo", indicó el mejor de sus hijos varones.

Durante dos horas declaró Leandro ante el juez Bonadio y el fiscal Carlos Rívolo. Respecto a la relación comercial con Los Sauces SA, Leandro Báez dijo que continuó después de la muerte de Néstor Kirchner, "hasta 2013 cuando salió el programa de PPT (de Jorge Lanata) hubo un quiebre en la relación por el escándalo mediático y no me acuerdo bien la fecha, pero Lázaro llamó al contador Bustos diciéndole que había que dar de baja los alquileres de los tres complejos y otros inmuebles que administraba la inmobiliaria Sanfelice y despuès Valle Mitre dejó de ser la administradora de los hoteles", expresó. Más adelante dijo que, "supongo que después de ese programa se juntaron con Cristina y Máximo y habrán decidido terminar la relación".

En la Estancia Cruz Aike, propiedad de Austral Construcciones cerca de El Calafate, Leandro contó que conoció a los Kirchner, "a Néstor, Cristina y Máximo los conozco por ser personas públicas con Néstor y Máximo compartí dos o tres asados y jugamos al fútbol y a Cristina una vez compartimos un asado en la estancia donde estuvo (Osvaldo) Sanfelice", remarcó. Respecto a Florencia Kirchner, sólo añadió: "nunca tuve trato, la conozco de vista al igual que a Romina Mercado, en lugares como el Mausoleo o en la calle, Gallegos no es muy grande".

Al momento de referirse a los alquileres por los que el Grupo Austral pagó desde 2009 a la inmobiliaria de la ex Presidenta más de $ 10 millones -según el informe pericial-, el hijo de Báez señaló que "la relación la tenía con Néstor, que era su amigo, después con Cristina sé que tuvo trato pero no sé si era el mismo, Lázaro era muy reservado en su relación con ellos". Y comentó que la relación comercial con la empresa de la ex Presidenta "la llevó adelante él sin consultar" y que los inmuebles alquilados a Los Sauces SA "debe haber sido por la relación que tenía Lázaro con Néstor y se alquilaban las viviendas" para el personal de Austral, Loscalzos y Del Curto.

Además, contó que Lázaro Báez ¨"asistía solo a las reuniones (con los Kirchner) y no nos comentaba lo que pasaba, las mismas podían ser en El Calafate, en Río Gallegos y/o en Buenos Aires". Bonadio le preguntó si hubo reuniones con los accionistas de Los Sauces SA en la Casa Rosada o en la quinta de Olivos. "Sé que fue a la quinta de Olivos pero no sé a la casa Rosada".

Accionista y director de varias empresas, Leandro dejó en claro la mala relación con su padre "con quien me peleé en 2011" y a quien en la indagatoria sólo mencionó como "Lázaro". En 2013 "me sacaron de Austral Construcciones", indicó el hijo del empresario K que integraba entonces el directorio de la firma investigada por recibir 52 contratos viales ( $ 46.000 millones) durante el kirchnerismo. Desde entonces estuvo manejando Austral Agro una firma dedicada a la compra y administración de estancias, también de su padre.

En este punto remarcó que continuó con firma en Austral Construcciones y que a veces "me llamaban para firmar los cheques para que no se retrasara el pago" y remarcó que toda la documentación "venía autorizada por Lázaro y las copias de los cheques con los cuales se pagaba también tenía la firma de Lázaro". Cuando se le preguntó sobre si en la emisión de cheques y las órdenes pasaban antes por el empresario K, Leandro señaló que "Sí" y que "toda la parte financiera lo manejaba Lázaro con sus contadores, él manejaba todo, todo, si uno se oponía era lo mismo que nada, todo se hablaba con Lázaro todo tenía que pasar por él".

Bonadio le preguntó al final de la indagatoria,​ si Báez tenía algún plan de contingencia por si le pasaba algo, "él siempre decía que antes que le pase algo iba a constituir un fideicomiso familiar pero nunca se llevó a cabo", dijo Leandro. 

En el mismo lineamiento Martín Báez​ presentó temprano un escrito donde remarcó que todas las decisiones "eran tomadas por mi padre" como así también con quienes se tenían "vínculos comerciales". Mañana declarará Luciana Báez, también defendida como Leandro por Julián Schettini.