El pedido de ayuda a un cartonero que le robaron el carro y se volvió viral

Ni los trabajadores de la calle se salvan de la inseguridad. Esta es la historia de Víctor, quien fue despojado de su herramienta de trabajo más elemental. El video lleva más de 76.000 reproducciones

Tucumán24/05/2017

Mariela Alderete

Cerca de las 20 h de ayer, martes 23 de mayo, el microcentro vivió un episodio que podría haber terminado en tragedia: tres presos de la Comisaría Primera prendieron fuego algunos colchones dentro de su celda. El videoperiodista, especialista en crónicas, Isaías Cisnero cubrió los hechos y, finalizado el altercado, emprendió su regreso por calle San Martín.

Mientras estaba llegando a su estudio, encontró unos amigos y se puso a charlar sin saber que otra historia lo encontraría.Víctor, un cartonero que trabaja todas las noches en el centro junto a su madre, Aurora, vio pasar a Isaías y se le acercó. “Me encaró este muchacho, quizá al ver la cámara pensó que podría darle una mano ‘haciéndole una nota’, me decía”, cuenta el camarógrafo en un posteo de Facebook.

“No sé en qué momento se fueron mis amigos o si los saludé porque me quedé colgado con su planteo, su necesidad, su pedido de una solución para seguir remándola. Es por eso que decidí grabarlo con el celular”, explica. Víctor, el cartonero de 27 años, contó que le habían robado el carrito con el que transporta todo el material recolectado y que ahora, a falta de su herramienta fundamental de trabajo, carga todo el peso sobre sus hombros.

Además, sufre de una malformación de nacimiento en sus extremidades, que todavía le dificulta más hacer el trabajo manual. “La pesada carga diaria le pasa factura a su espalda. Solo necesita eso, un carro de mano para seguir sobreviviendo. ¿Algún político que se cope?”, cierra su posteo Cisnero, y acompaña lo escrito con una foto de Víctor y el siguiente video:

El videoperiodista, especialista en crónicas, Isaías Cisnero cubrió los hechos y, finalizado el altercado, emprendió su regreso por calle San Martín. Mientras estaba llegando a su estudio, encontró unos amigos y se puso a charlar sin saber que otra historia lo encontraría.

Víctor, un cartonero que trabaja todas las noches en el centro junto a su madre, Aurora, vio pasar a Isaías y se le acercó. “Me encaró este muchacho, quizá al ver la cámara pensó que podría darle una mano ‘haciéndole una nota’, me decía”, cuenta el camarógrafo en un posteo de Facebook. “No sé en qué momento se fueron mis amigos o si los saludé porque me quedé colgado con su planteo, su necesidad, su pedido de una solución para seguir remándola. Es por eso que decidí grabarlo con el celular”, explica.

Víctor, el cartonero de 27 años, contó que le habían robado el carrito con el que transporta todo el material recolectado y que ahora, a falta de su herramienta fundamental de trabajo, carga todo el peso sobre sus hombros. Además, sufre de una malformación de nacimiento en sus extremidades, que todavía le dificulta más hacer el trabajo manual. “La pesada carga diaria le pasa factura a su espalda. Solo necesita eso, un carro de mano para seguir sobreviviendo. ¿Algún político que se cope?”, cierra su posteo Cisnero, y acompaña lo escrito con una foto de Víctor y el siguiente vide

La publicación de Isaías en Facebook tuvo una enorme repercusión, el video lleva más de 76.000 reproducciones y muchos tucumanos enviaron mensajes ofreciendo ayuda para la compra o fabricación del carro. “Anoche dormí con una mezcla de angustia por la realidad de este pibe que a la vez tiene ese espíritu de lucha, de ‘no bajar los brazos’. Por otro lado, sentí paz, por la solidaridad de la gente, quizá suene trillado pero cosas así te ayudan a pensar que no todo está perdido”, concluye Cisnero.

Si podés colaborar con este trabajador, acercate llegada la noche al microcentro de San Miguel deTucumán; sus sectores son parte de calle San Martín y peatonal mendoza. No tiene celular, pero vive por el acceso norte cerca del hipermercado. También podés ayudar compartiendo esta historia para que llegue a oídos más altos y Víctor y su familia vuelvan a tener su carrito para trabajar.