Tras la crisis que atraviesa el gobierno, Alberto Fernández suspende su viaje a México y Nueva York

Debido a la crisis política que atraviesa el Gobierno y tras la explosiva carta de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, el presidente Alberto Fernández decidió suspender el viaje que tenía previsto realizar a México y a Nueva York. En el Distrito Federal iba a participar de la conferencia de la CEPAL (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) desde el sábado 18, y el martes 21 de septiembre iba a participar de la Asamblea de las Naciones Unidas en forma presencial.

Hasta mitad de la tarde del viernes en ceremonial de la Presidencia de la Nación todavía afirmaban que el viaje continuaba en pie. “Tenemos todo preparado”, le había dicho un integrante del equipo de comunicación de Alberto Fernández a Infobae. Todavía no había trascendido la carta de la vicepresidenta, con duros cuestionamientos hacia la gestión presidencial y críticas para varios integrantes de su Gabinete. Cuando empezó a anochecer se suspendió la travesía.

Según trascendió, los hombres de confianza del Presidente no quieren dejar a cargo del Poder Ejecutivo a Cristina Fernández por más que haya asegurado en su carta que “…hasta he sufrido un vicepresidente, (por Julio Cobos), declaradamente opositor a nuestro gobierno. Duerman tranquilos los argentinos y las argentinas… eso nunca va a suceder conmigo”.

Luego del mal resultado en las PASO del domingo y ante la deserción de varios líderes mundiales de la asamblea que se hará en Nueva York, ya estaba casi decidido que el viaje solamente iba a ser por tierra mexicana, ya que Argentina aspira a quedarse con la presidencia pro témpore del organismo, que hará su sexto encuentro desde el sábado. Ante la ONU, finalmente, Argentina participará a través de una videoconferencia.

Cuando el 28 de julio pasado Fernández viajó a Perú para la asunción del nuevo mandatario de ese país, Pedro Castillo, mantuvo reuniones con su par de Ecuador, Guillermo Lasso, y con el canciller mexicano, Marcelo Ebrard.

Allí les manifestó su intención de acceder a la presidencia del foro que agrupa a 32 países y que surgió como una opción para reemplazar las acciones de la Organización de Estados Americanos (OEA) que encabeza Luis Almagro entre los países de Latinoamérica y el Caribe, con una política que vaya más allá de los intereses de Estados Unidos en la región.

En los días previos a ese viaje a Lima, el canciller argentino Felipe Solá intervino en la cumbre de ministros de Relaciones Exteriores de la CELAC en México, donde había logrado el apoyo de las principales naciones de la región para que Argentina acceda a la titularidad del organismo.

Todos los países importantes de América Latina -México, Colombia, Chile, Uruguay, Ecuador y Paraguay, por ejemplo- respaldan la candidatura de Alberto Fernández, pero desde que se retiró a consultas en Buenos Aires al embajador argentino, Daniel Capitanich, de la sede diplomática en Managua por las denuncias sobre violaciones a los derechos humanos en Nicaragua de parte del régimen de Daniel Ortega, el país centroamericano empezó a presionar para boicotear las aspiraciones argentinas.

Los países que integran la CELAC son: Antigua y Barbuda, Argentina, Bahamas, Barbados, Belice, Bolivia, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Dominica, Ecuador, El Salvador, Granada, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras, Jamaica, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Surinam, Trinidad y Tobago, Uruguay y Venezuela.

A pesar de la grave crisis institucional que envuelve a su Gobierno, el presidente Alberto Fernández participará este viernes desde las 9.30 de manera virtual del Foro de las Principales Economías sobre Energía y Clima (MEF, por sus siglas en inglés), una reunión convocada por el mandatario de los Estados Unidos, Joe Biden.