

Con la cuenta regresiva marcando apenas dos semanas para el cierre de listas de cara a las elecciones nacionales, el gobernador tucumano Osvaldo Jaldo intensifica los esfuerzos para consolidar la unidad dentro del frente oficialista.
En una serie de reuniones clave con referentes de Tucumán Primero, el mandatario, quien también ocupa la vicepresidencia del Partido Justicialista a nivel provincial, remarcó la necesidad de sostener el diálogo político como herramienta fundamental para la etapa que se avecina. “Apuntamos a cerrar las nóminas lo más unidos posible”, señaló Jaldo ante la prensa, consciente de los desafíos internos que implica lograr ese objetivo en un contexto político marcado por tensiones y candidaturas latentes.
Aunque aún no se han confirmado nombres para competir en la interna, prevista para el 6 o 7 de agosto, el gobernador aseguró que las negociaciones avanzan con miras a presentar una fórmula sólida de cara a la elección general del 26 de octubre. En ese marco, reiteró su compromiso con el proceso y su disposición a ocupar el rol que sea necesario: “Siempre he sido un bombero voluntario en la política. Estoy donde haga falta para que el proyecto avance”.
Lejos de limitarse al plano electoral, Jaldo también puso el foco en la gestión. “Las elecciones intermedias no son un punto final, son parte del camino. Hay que seguir gobernando, en Tucumán y en la Nación”, expresó, aludiendo a la importancia de sostener la gobernabilidad más allá de los comicios.
Con tono conciliador pero firme, Jaldo busca posicionarse como el garante de un armado político que combine competitividad electoral y cohesión interna. En un escenario nacional donde las fracturas partidarias son moneda corriente, el mandatario tucumano apuesta por el consenso como base para encarar no solo las urnas, sino también los desafíos que esperan al día siguiente.







